Es cierto que no soy escritora, tal vez no lo seré profesionalmente, no he estudiado este campo lo suficiente... lo mio es algo mas sencillo, solo dejo fluir mi pensamiento ante mis sentimientos, ante mi penumbra, mi soledad, ante mi alegría, ante mi tristeza y sobre todo ante mi amor... este amor imposible de nombrar y difícil de evadir, este amor que me sobrecoge y esconde mi voz para que crezca en palabras flotantes en mi mente. Son un fluido de pensamientos mis palabras que intentan describir lo que siento en mi soledad y que no se trata de una falta de compañía, mas bien es un apoyo emocional que he perdido cuando me escondo del mundo en mi encierro, en mi cárcel que es el único lugar en el que encuentro un amor silencioso... Mis pensamientos son oscuros y nublados, pocas veces vienen con un rayo de luz que dibuja un pequeño arco iris tratando de inspirar el alma que camina taciturna y perdida...

Son palabras que no se controlan, que se escapan de mis ojos y se intentan dibujar en escritos que posiblemente ni yo misma entienda, son mensajes de mi corazón que flotan hacia un olvido y un devastado pasado que no permitirá un recuerdo. Fluidos que se esconden como hormigas con la llegada del invierno cuando me piden que exprese con palabras esto que siento y en la mayor parte del tiempo, siempre prevale el amor que te tengo, un amor imposible e incondicional, que has dejado escapar por años sin dejarlo volar porque cortaste sus alas, cerraste sus ojos y se condeno solo, a una vida en la que un solo lugar puede brindarle esa felicidad que le hiciste sentir algún día...

Por eso, amor mio, mi lucero, mi esplendor, te dejo estos pensamientos incontrolables... que saldrán de su escondite cuando lo consideren necesario a expresarte las mas grandes penumbras o las maravillosas felicidades que sigues causando después de tanto tiempo...